Crecí donde el amor era escaso, donde un “te amo” sonaba a duda y las miradas pesaban más que el silencio y aprendi a no pedir a conformarme con los restos y llamar cariño a lo que dolía.
Intentando no quebrarme deseando que algun día alguien me ame de verdad que me de algo más que sobras y me enseñe que merezco mucho
Y cuando quise amar solo encontré reflejos de lo mismo manos que soltaban cuando más necesitaba bocas que prometian y no cumplian bocas que decían amarme pero realmente no me sentía amado
Cuando busco abrigo en otros brazos vuelvo a sentir el mismo frío el mismo vacio disfrazado de cariño y con la esperanza terca que el amor no me pida sufrir primero mi única compañía es el vacio que siempre esta ahi supongo que algun dia me acabara .
El amor me enseñó a tener miedo de necesitarlo a estar siempre alerta pensando en probabilidades q puedan pasar quizas no nací para el amor si no para el frío del mundo